A veces ocurren situaciones extrañas cuando uno va a un hostal. Afortunadamente no son muchas. Mas son las situaciones que me han contado, pero aquí vamos.
1. La Puerta Abierta: Alguna vez estuve tan ebrio con una compañera de la universidad, que nos fuimos raudamente a un hostal. Lo hicimos como animales en celo y tras abstinencia de varios meses. Probablemente compite por entrar al "Top 10" de mis noches mas salvajes. Estuvimos despiertos hasta las 5 que nos quedamos dormidos de cansancio. Me desperté a las 7, aun cansado me dirigía al baño y veo la puerta de la habitación abierta!. Inmediatamente pensé "chucha entraron a robarnos". Corrí hacia mi billetera y mi nuevo celular y ahí estaban. Intenté despertar a Gissela, pero estaba tan profundamente dormida que hasta pensé que la habrían drogado. Rebusqué sus cosas y tenía, al igual que yo, todas sus cosas. Se me cruzaron un montón de posibles hipótesis: desde el robo hasta el secuestro de órganos. Finalmente luego de varios minutos, empezaron a aparecer los primeros flasheos de la noche.
Apenas entramos a la habitación, Gissela me dijo que no podía cerrar la puerta, porque al parecer estaba descentrada y había que aplicarle una buena empujada. Me acerqué, hice un primer intento y no llegó a cerrarse. Así que me dispuse a sacar la casaca para mayor comodidad. Ahí fue cuando Gissela se acercó a mi pantalón, lo bajó y yo olvidé totalmente el tema de la puerta. Las preguntas posteriores que me hice fueron: ¿alguien habrá pasado durante la madrugada y nos habrá visto?, porque digamos que no fuimos muy silenciosos esa noche es mas ¿alguien nos habrá filmado? ¿apareceré en cholotube?